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Los vecinos de las comunidades numero 42, 44 y 46 de la Avenida Torrelavega, en Oviedo, han redactado una carta para exigir a los vecinos del número 45, ubicado justo enfrente de los tres anteriores, la retirada de la concesión a la empresa de telefonía que mantiene tres emisores de ondas electromagnéticas en el ático del edificio.

Los vecinos muestran en su carta los daños que provocan en su vida cotidiana estas antenas.

Estos problemas van desde dificultades para dormir hasta dolores de cabeza, pasando por “un incremento de los casos de cáncer detectado desde que las antenas están ahí”. Aseguran que algunos vecinos han trasladado sus habitaciones a la parte trasera del edificio y muchos incluso “han intentado venderlo, si bien es difícil al tener los emisores delante y, cuando aparece algún interesado, desprecia el piso porque no vale lo mismo con antenas ahí”.

Lo que reclaman es que la comunidad del número 45 “se dé cuenta de que por mucho dinero que les paguen no vale lo que la salud de la gente”. En este sentido, hay que recordar que la comunidad del número 75 retiró en octubre pasado su antena atendiendo a las peticiones vecinales”. Aun así el caso del bloque número 45 es peor al tratarse de una maquinaria mucho mayor, ya que incluye tres emisores juntos. En la carta también se advierte al número 45 que, en la última ampliación, el emisor instalado es de un tipo que también afecta a los habitantes del propio edificio, ya que envía ondas en todas direcciones por lo que podrían verse afectado ellos también, los vecinos esperan que de esta manera se den cuenta de la problemática que supone tener una antena de telefonía en la azotea del edificio.